HISTORIA DEL TELÉFONO
El primero en presentar
evidencias físicas y tal vez el más importante, fue el italiano Antonio Meucci,
que en 1854 inventó el telettrófoni. Meucci inventó un artefacto capaz de poder
comunicar su voz desde la planta baja de una casa con el piso superior. Pero al
ser pobre, no tenía el dinero suficiente para poder patentarlo. Este hecho lo
aprovecharon más adelante otros inventores que utilizaron el principio de
funcionamiento de este mecanismo, como veremos a continuación.
El inventor que registro
este invento del teléfono como suyo, es Alexander Graham Bell en 1876. Fue un
científico británico que patentó el invento del teléfono el 14 de enero de
1876, en Nueva York (Estados Unidos de América). No si gran controversia, ya
que ese día dos hombres, Graham Bell y Elias Gray, se presentaron en la Oficina
de Patentes de Nueva York para registrar un inaudito e insólito invento: el
teléfono bajo el patente número US178399A.
Pero Bell, llegó a las doce del mediodía y Gray dos horas después. Esa
diferencia consagró al joven escocés, Bell, como padre del teléfono, el invento
más importante de su tiempo.
LA PRIMERA LLAMADA
La primera llamada sin cables
tuvo lugar en 1973 gracias a Martin Cooper, ingeniero de la empresa de
telecomunicaciones Motorola.
Durante los años siguientes, los avances tecnológicos permitieron desarrollar los primeros modelos de teléfono móvil, que permitían comunicarse desde cualquier lugar. En ese momento, la llamada podía tener una duración máxima de 30 minutos.
HISTORIA DEL TELÉFONO FIJO
Los primeros teléfonos de
la historia eran fijos, para utilizarlo, había que colocarse un auricular en
cada oreja y hablar sobre la caja, que hacía las veces de micrófono El
principio básico mediante el cual operaba este equipo se aplica aún en la
actualidad. Una fina membrana de acero absorbe las ondas sonoras de las
palabras y vibra en una forma que se corresponde exactamente con la modulación
de esas ondas. La membrana convierte el patrón de las ondas sonoras en vibraciones
análogas de corriente, cuya intensidad, fluctúa según la modulación original.
En el receptor, los impulsos eléctricos son recogidos por un electroimán que
hace que otra membrana vibre, esta emite entonces las ondas sonoras que la
persona al otro lado recibe a través del oído. El aparato alcanzaba una
distancia de 90 mts. de distancia y la comunicación solo se establecía entre
dos aparatos conectados entre sí por hilos de cobre, también necesitaban
aportar la energía necesaria para establecer la comunicación, así que los
conocidos como teléfonos de batería local se alimentaban a base de pilas. Sin
ir más lejos, el Gower-Bell, uno de los primeros modelos que se utilizaron en
Europa, albergaba su batería dentro de una caja de madera. el aparato alcanzaba
una distancia de 90 mts. de distancia la comunicación solo se establecía entre
dos aparatos conectados entre sí por hilos de cobre.
Con la llegada del disco rotatorio (donde se marcaban los números del 0 al 9) se dejó atrás la necesidad de una operadora para realizar llamadas; pero fue hasta 1884 que se lograron hacer llamadas a larga distancia, la primera fue entre los estados de New York y Boston, Estados Unidos.
Aunque cinco años después
llegaron los teléfonos públicos con moneda, fue hasta la invención de la radio
que los teléfonos se encaminaron a lo que conocemos hoy.
Desde su concepción original se han ido introduciendo mejoras sucesivas, fuese en el propio aparato telefónico como en los métodos y sistemas de explotación de la red.
GENERACIONES DEL CELULAR
La primera generación de telefonía móvil (1G) utilizaba un protocolo de transmisión analógico –en España, el TMA–, y sólo servía para realizar llamadas de voz. No permitía roaming –sólo funcionaba en un país–, usaba baja frecuencia –en los 800 MHz– y ancho de banda –30 kHz– y era poco eficiente en términos de uso del espectro y la energía.
La segunda generación
(2G) representó la transición a un protocolo digital –el GSM o Global System
for Mobile Communications–, e incorporó el sistema de mensajes cortos SMS.
Existía un protocolo de transmisión de datos, el GPRS, que permitía el envío de
MMS –Mensajes Cortos Multimedia–, e incluso el acceso a Internet y el envío de
correos electrónicos. Sin embargo, GPRS funcionaba de forma parecida a un
módem: la transmisión de datos se trataba como una llamada, era extremadamente
lento –64 kbps al principio; 144 kbps en las generaciones 2.5 y 2.7– y los
costes eran muy elevados.
Con el cambio de siglo llegó la tercera generación (3G). En Europa, se denominó UMTS o Universal Mobile Telecommunication System. Ofreció nuevos servicios, como el roaming automático, y aumentó la velocidad de transmisión hasta unos impresionantes 2 Mbps, suficientes para que funcionaran las primeras aplicaciones móviles y atreverse con cosas como las videoconferencias con muy baja resolución, navegar en Internet, enviar y recibir correos con archivos adjuntos grandes, etc. Para conseguir todo esto, se incrementó la frecuencia hasta los 2,1 GHz. Sin embargo, voz y datos seguían yendo por separado.
La cuarta generación (4G)
es una mejora de 3G que unifica todo –llamadas y datos– bajo el mismo protocolo
IP, de manera que no existe mucha diferencia entre una llamada telefónica y una
hecha, por ejemplo, a través de WhatsApp. Se la conoce también como LTE o Long
Term Evolution. Puede ofrecer velocidades de descarga de hasta 100 Mbps. Es la
telefonía que utilizamos todos actualmente.
Qué promete la tecnología
5G
El despliegue de la
quinta generación está previsto para el año 2021. Las tres principales mejoras
de 5G son un incremento de la velocidad de transmisión –hasta un objetivo de 10
Gbps–, una reducción de la latencia –hasta 1 ms– y la posibilidad de ofrecer
servicios como network slicing.
Otras mejoras son que las
antenas soportan más conexiones simultáneas –puede haber muchos más
dispositivos por unidad de área–, son posibles conexiones directas entre
dispositivos, el empleo de protocolos de comunicación de muy bajo consumo de
energía y repartir los recursos entre los usuarios, priorizándolos. Para conseguirlo,
5G aumentará la frecuencia hasta el entorno de los 60 GHz, lo que va a reducir
levemente el alcance… de manera que harán falta más antenas.
GEN |
Servicio principal |
Factor diferenciador |
Mayor flaqueza |
Años |
1G |
Telefonía móvil con radio analógica |
Primera telefonía inalámbrica |
Ineficiente e insegura |
1982- 1990 |
2G |
Telefonía
digital y SMS |
Seguridad,
adopción masiva |
Ancho
de banda para nivel módem |
1990
– 2004 |
3G |
Telefonía digital, SMS y algo de datos |
Navegar por webs en el móvil |
Internet caro y no muy rápido |
2004- 2010 |
4G |
Todos
los servicios se ofrecen por IP (voz incluida) |
Conexión
rápida y con muchos más Gb para gastar |
Prestaciones
por detrás del cable |
2010-
2021 |
5G |
Internet móvil |
Velocidad, latencia, fiabilidad, coste
bajo, compartición de red |
Alcance de la señal debido al empleo de
altas frecuencias |
2021- ¿? |
No hay comentarios.:
Publicar un comentario